ꕥ ¡Hola a todos/as!
Hoy vengo a hablar sobre la segunda novela de la serie de la detective Erika Foster.
En esta ocasión, el caso que tiene que resolver nuestra detective es bastante complejo. Aparecen cadáveres de hombres asesinados por asfixia, con las muñecas atadas y con una bolsa de plástico atada por encima de la cabeza.
Cuando busco leer libros de detectives o novelas policíacas, me fijo muchísimo en la forma en la que ha aparecido el cadáver o en la escena del crimen. Cuanto más retorcido sea, mejor.
La manera en como está explicada la historia, las investigaciones que hacen y la espiral en la que te envuelve buscando al culpable son de vértigo.
Me encanta que un buen libro de novela policíaca te haga sospechar de mil personajes diferentes para que al final el culpable sea el que menos esperas. Son ese tipo de historias que al leer en las últimas páginas la verdad y el por qué de todo te quitan el hipo.
De cinco estrellas le doy tres por que no es de las mejores novelas que he leído ni lo releería nunca, pero sí que es cierto que Erika Foster como protagonista me gusta mucho y espero tener toda la colección de esta detective.
Alba. ღ
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