★★★★☆ (4/5)
¡Hola a todos/as!
Tras hacer un pacto con el diablo, Addie entrega su alma a cambio de la inmortalidad. Sin embargo, ningún trato Faustino está exento de consecuencias: el diablo le entregará la inmortalidad que tanto desea, pero le quitará algo que ella anhelará durante toda su existencia: la posibilidad de ser recordada.
Addie abandona su pequeño pueblo natal en la Francia del siglo XVIII y comienza un viaje que la lleva por todo el mundo, mientras aprende a vivir una vida en la que nadie la recuerda y todo lo que posee acaba perdido o roto. Durante trescientos años, Addie LaRue no será más que la musa de numerosos artistas a lo largo de la historia, y tendrá que aprender a enamorarse de nuevo cada día, y a ser olvidada a la mañana siguiente.
Su único compañero en este viaje es su oscuro demonio de hipnóticos ojos verdes, quien la visita cada año en el día del aniversario de su trato. Completamente sola, a Addie no le queda más remedio que enfrentarse a él, comprenderlo y, tal vez, ganarle la partida.
Pero un día, en una librería de segunda mano de Manhattan, Addie conoce a alguien que pone su mundo del revés... Por primera vez, alguien la recuerda.
La historia está narrada en tercera persona y capítulos muy cortos en varios tiempos diferentes, alterando entre ellos el presente y el pasado, protagonizados en su mayoría por Addie.
La trama gira en torno al pacto que hizo Addie con un dios de la noche, concediéndole este el poder de ser inmortal pero con una condición terrible que ella no sabía: ser olvidada, nadie la reconoce, ni la recuerda. El ansia de libertad de Addie pudo con ella e hizo un trato que la sentenció para siempre.
Al ser un libro de fantasía, me dio mucho miedo porque es un género que no me gusta demasiado y en cambio en este libro me ha sorprendido mucho y para bien, porque no tiene demasiadas situaciones extravagantes y/o surrealistas. Es un tipo de fantasía que tiene un toque muy importante de realismo y supongo que por eso me gustó y no me pareció en ningún momento ni absurdo ni patético.
La pluma me pareció fascinante, ya que en el presente vamos viendo lo que le va ocurriendo a Addie y en el pasado entendemos el porqué de lo que está viviendo y como se va curtiendo a lo largo de los años para acostumbrarse a la vida que le ha tocado vivir. Pero le vi un pequeño inconveniente y es que da demasiados detalles de los lugares y de lo que siente la protagonista así como descripciones y expresiones muy repetitivas. En este sentido se me hizo un poco pesado a pesar de resulta una historia intrigante. En resumen, digamos que es un libro bastante lento.
La ambientación es de lo mejor del libro ya que viajaremos por el tiempo y por la historia al lado de Addie, viendo como vive. Estos detalles me parecieron muy interesantes y me gustaron muchísimo. La parte de romance que compone el libro también me pareció bonita y justa.
Un final precioso que me gustó mucho y que no esperaba, así que seguro que yo sí recuerdo a Addie LaRue por mucho tiempo.
Alba.
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