★★★★☆ (4/5)
¡Hola a todos/as!
Han pasado cinco años desde el terrible accidente en que murió su esposa y Noah Wallace, un brillante analista criminal, está retirado desde entonces. Pero una postal encontrada en la escena de un crimen atroz le implica directamente y su antiguo compañero lo llama de inmediato. En cuanto llega, ambos se dan cuenta de que todo apunta a la última investigación en que trabajaron juntos y a un asesino al que daban por muerto. En ese momento, en la mente de Noah aparece un triciclo rojo.
Mientras, una joven periodista y bloguera, aficionada a los misterios sin resolver y a las organizaciones secretas, recibe un correo que la invita a acceder a la Darknet para seguir la pista de un reportero desaparecido en los años setenta.
¿Y si ambos casos estuvieran vinculados por un sórdido secreto?
La historia está narrada en tercera persona y protagonizada por varios personajes, principalmente por Noah.
La trama gira en torno a la investigación policial de una serie de asesinatos macabros que suceden en la ciudad. La investigación es tanto policial como periodística y esos dos puntos de vista me gustaron mucho, ya que tenemos dos enfoques distintos para ver lo mismo.
La acción es rápida y muy adictiva, es un libro que se lee sin darse cuenta gracias a todos los giros que posee, el diálogo justo y conciso y las descripciones necesarias sin resultar pesadas ni sobrantes. En este sentido es un thriller ideal para seguir el hilo desde el inicio hasta el final.
Los personajes están muy bien construidos pero, para mi gusto, había demasiados, y al ser un libro que leí de manera pautada por hacerlo en lectura conjunta, me hizo perder el hilo al haber tantos personajes distintos. Entrelazarlos al final entre ellos me costó bastante y aunque todo encajara me resultó difícil entenderlo bien.
Un thriller policial con una gran crítica social que disfruté mucho y que recomiendo más todavía.
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